Es la locura del aguacate, en instagram perfiles de más de tres mil followers únicamente dedicados a esta fruta nahúatl, a eso se suman 9 millones de platos de aguacate etiquetados,  en el mundo han abierto restaurantes enteros consagrados a él. El aguacate, de sabor graso, fresco y delicado, extra fácil de maridar con mil cosas, sencillo y sano a la vez.

 

Para los nahuas, el aguacate era un fruto muy especial, afrodisiaco. Nombre que etimológicamente proviene del ahuacatl que literalmente significa “testículo de árbol”.

 

 

¿Es de verdad para tanto?

Hay muchos posts y videos como este en el que pregonan los grandes beneficios de integrar el aguacate en nuestra dieta diaria. Se habla de las grandes propiedades antioxidantes, antiparasitarias, antihipertensivas, anticancerígenas, lleno de potasio, para una buena visión, pérdida de peso, etc.
En un artículo de Healthybutsmart se analizan 20 ensayos clínicos relacionados con las afirmaciones de los superpoderes del aguacate. Podemos observar que como siempre las cosas que nos transmiten hay que tomarlas con pinzas pues nada es tan sencillo como a simple vista. Por ejemplo a la conclusión de si los aguacates reducen el colesterol después de revisar varios estudios es que si, como cualquier grasa insaturada. Pero hay que tener en cuenta que no ha de ser una adición a la dieta, sino un sustituto a otros tipo de grasas menos beneficiosas. Así que no creas que por comer aguacate reducirás el impacto de las grasas de aquellas patatas fritas.
A nivel de salud creo que podemos concluir que el aguacate es beneficioso como lo es cualquier fruta, lleno de vitaminas minerales y en este caso altamente rico en lípidos de alta calidad. Pero como todo no hay que exagerar ni pensar que es un medicamento que nos resolverá la vida.
Y como todas las modas, la del aguacate tiene un lado muy oscuro
La importación del aguacate a Europa creció 400% en 17 años, y continúa al alza, pero como todo en economía hay recursos limitados. Lo cual está provocando grandes problemas en las naciones productoras, algunos económicos y otros de impacto medioambiental.
Un problema importante que se analiza en un artículo de The Guardian es que en el mayor productor y exportador del mundo de aguacates, México, el consumo interno del producto ha bajado en un 25% debido al aumento de los precios. Ahora comienza a ser considerado un alimento de lujo en un país en que este alimento ha sido durante siglos base de la alimentación de toda la población.
Por otro lado están los problemas medioambientales, pues los aguacateros requieren de mucha agua para crecer (2000 litros para producir un kilo).
Podemos observar algunos de los efectos devastadores de la producción extrema de este alimento en este documental sobre el aguacate. Ríos transformados en basureros, desiertos en dónde antes había manantiales de agua…estremecedor.
Es muy iluminadora la lectura de un estudio en el que se analizan estos impactos ambientales y socioeconómicos en la zona de Michoacán en México, que es la mayor zona productora del mundo.  Esto demuestra que el cultivo de aguacate ha ayudado en gran manera al desarrollo económico de la región generando unos 96, 4000 empleos anuales. En el lado negativo, esto alienta a los silvicultores a vender sus tierras a los productores de aguacate lo cual pone en riesgo de desaparición de diversos ecosistemas. Con el problema añadido del cambio climático.
Si, el aguacate es delicioso, pero… como todo, todo con medida, nada con exceso.